En nuestra sociedad de hoy estamos siempre ocupados. Sea con el trabajo, con los estudios o cualquier otra obligación que tengamos en determinados momentos del año. Por eso llegamos a un punto en que decimos: Necesito vacaciones y tiempo libre para hacer lo que yo quiera!

Este periodo de tiempo, lo puedes aprovechar para aprender un idioma, mejorar tus conocimientos y descubrir nuevos países y culturas.  Es el mejor momento para viajar a un país extranjero y combinar las vacaciones con un curso de inglés, francés o alemán. Te preguntas por qué?

Un curso de francés en Lyon por ejemplo no significa estudiar el día completo, sino estudiar francés por la mañana y después profundizar de una forma más amena el idioma, la cultura y la vida de la ciudad de los cien campanarios. Mientras paseamos por el casco antiguo reconocemos muchas palabras recién aprendidas durante la clase de francés, podemos visitar los monumentos de gran interés turístico y relacionarnos con los habitantes, sumergiéndonos en la cultura francesa.

Otro ejemplo para aprovechar tus vacaciones para aprender un idioma podría ser un curso de alemán en Freiburg, la típica ciudad de la selva negra. En nuestra escuela de alemán puedes participar en un curso por la mañana y después probar una típica comida alemana o ir de excursión a los bosques de la selva negra.

Imagínate disfrutar de un día de playa o un paseo en barco después de una mañana de curso de inglés en Malta! Incluso puedes llevarte un libro escrito en inglés en el bolsillo y practicar el idioma en cada sitio que te gusta de esta preciosa isla.

Como puedes ver hay muchas posibilidades de enriquecer tus vacaciones y aprovechar al máximo de tu curso de alemán, francés o inglés.

Si no tienes claro el destino o la escuela pero quieres hacer un curso de idiomas en el extranjero, contacta con nosotras, te proporcionamos toda la información que necesitas.